Padres, esta es vuestra

Tema poco tratado en este módulo del máster, y creo que fundamental, es la prevención del consumo de drogas. ¿Por qué? Porque en clase hemos hablado de los trastornos mentales, y uno de ellos es la dependencia de sustancias.

Una realidad mayoritaria de la juventud, tanto actual como de hace 20 años, es el consumo de alcohol en el tiempo de ocio. Lo que sí sucede ahora mismo es que cada vez se comienza a consumir a una edad más temprana. Y como con el alcohol, con el resto de sustancias que alteran el estado de consciencia.

Para empezar, es necesario hablar de sustancias, de drogas. No hacerlo no solo no sacia la curiosidad de algunos estudiantes, sino que los lleva directamente a la desinformación que existe en internet y, más que prevenir su consumo, se promueve la ocultación del mismo.

Muchas veces el concepto de drogas, adicción, drogodependiente, etc. mueve algún tipo de miedo en los adultos. Se imaginan a una persona tirada en la calle, sin trabajo, sin dinero, sin casa y con una aguja clavada en alguna zona del cuerpo con piel fina. Siento decir que la realidad es muy distinta: a una adicción se llega por un primer consumo, y a un primer consumo se llega por curiosidad, en primera instancia, y por no informarse de los daños colaterales, en segunda.

Quienes hayan leído hasta aquí habrán escrito en su mente: y qué vamos a hacer, ¿decirles a los chicos que se droguen?

No.

Enseñarles lo que son las sustancias, el alcohol, el tabaco... Los daños que causan, cómo pueden paliarlos y, sobre todo, cómo comportarse en caso de conocer a alguien que se encuentra en una situación vulnerable, bien sea por posible dependencia, o cualquier otro caso en el que su bienestar peligre.

Una forma de introducirles el tema, de forma sutil, es sobre una charla de prevención. Eso sí, que el mensaje no sea el siguiente: 

sino este:

Me parece importante que, ya que los adolescente (muchos de ellos) se mueven en entornos como discotecas en los que, seamos realistas, no solo se consume alcohol y tabaco (de por sí, problemáticos), es necesario explicar este tipo de realidad. Debe hacerse de una forma didáctica y entretenida, sin imposiciones y advirtiendo de las consecuencias.

Para todos aquellos que quieren saciar sus ganas de aprender sobre este mundo, recomiendo una web llamada Energy Control. Aparte de hablar de un «consumo responsable» (concepto un poco debatible), también imparte charlas sobre prevención y riesgos.